La práctica de la atención sanitaria es, sobre todo, comunicación; comunicación en primer lugar con el usuario al que cuidamos y también es, o debería ser, comunicación entre profesionales y con la sociedad.
La comunicación de lo que observamos, decidimos y hacemos con el paciente (junto a él) a otros profesionales es un elemento fundamental del trabajo diario de la enfermería y permite que la labor de cada uno se continúe de forma fluida y coherente con el que el usuario necesita.
Por desgracia muchas veces esa comunicación «no consta», que no quiere decir que no se realice sino que se realiza de forma verbal o informal (esas libretas, pizarras, docs reeditados cada turno…) contribuyendo a una modalidad de invisibilidad insidiosa pero terriblemente efectiva cuando cae en manos interesadas.
Se podría establecer un símil con la invisibilidad a la que nos someten, por ejemplo, los medios de comunicación cuando «omiten» mencionar a la enfermería al difundir noticias sobre avances técnicos o temas de salud. Podríamos decir que también ahí la labor de la enfermería figura informalmente; como escrita con una tinta especial, una tinta invisible.
Pero la tinta invisible que yo conozco se puede activar si se le aplica calor y en este blog estamos en ello tratando de aplicar calor a través de las redes sociales en todos los aspectos en los que la profesión quiere y debe sentirse «visible»; en primer lugar de forma interna abordando el autoconcepto de la importancia de los cuidados en la salud de los ciudadanos y el compromiso con la mejor evidencia disponible tal y como sugiere #MeLaPela
Segundo; reforzando la identidad profesional como hacen las iniciativas #YoNoPaso o #YoSiDoyLaNota y actuando en la esfera de la imagen pública a la par de iniciativas reivindicativas como #AlertaATS que ha obtenido ciertos resultados tangibles o la propia #EnfermeriaVisible que ha conseguido que un buen grupo de profesionales tomemos conciencia de que la profesión no avanzará a menos que nosotr@s mismos nos pongamos en marcha.
Aún queda mucho por delante, sólo hemos lanzado iniciativas en las redes sociales y hace falta llegar al «mundo real» e implicar a más profesionales para que pasen «del silencio a la palabra«.
Acabamos de empezar y debemos ser conscientes que va a ser mucho el calor que deberemos aplicar para conseguir una Visibilidad tangible.
Xosé Manuel Meijome Sánchez